Mujeres artesanas trabajando
Mujeres artesanas trabajando

nuestra historia

Shamuk es un proyecto personal de su fundadora Paz Huergo, enfocado a colaborar, no exclusivamente, pero sí en su gran mayoría, con mujeres campesinas y artesanas de Ecuador.

Como suele ser habitual, las mujeres son uno de los grupos más perjudicados en situaciones de pobreza. A la precariedad económica, hay que añadir el machismo de la sociedad, la violencia intrafamiliar y la dificultad de acceder al mercado laboral.

Las mujeres artesanas se enfrentan a dos problemas fundamentales:

  • El producto, que no siempre se adapta a los gustos y necesidades de los clientes con capacidad de adquirirlos.
  • La comercialización. En su entorno cercano no es tarea sencilla vender lo que producen porque la mayoría de sus vecinos viven en una situación de pobreza similar, lo que hace que destinen sus escasos recursos a la adquisición de productos básicos y de primera necesidad, y que, además conocen la forma de confeccionar esas artesanías. El acceso a canales de comercialización más amplios como pueden ser las medianas o grandes ciudades de Ecuador lo perciben como inalcanzable, no tienen capacitación (la mayoría de ellas tienen unos niveles de alfabetización básicos) y, lo que es peor, no creen que a nadie le pueda interesar lo que hacen porque en una sociedad donde la mujer está relegada al círculo del hogar, sus niveles de autoestima y de confianza en sí mismas son escasísimos.

Shamuk empieza a gestarse a principios del 2017, pero es en diciembre de ese año cuando ya se crea formalmente e inicia su actividad de una manera más organizada.

Shamuk significa “futuro” en kichwa, más concretamente, “lo que está llegando”, porque ese es el objetivo: mejorar el futuro de estas mujeres, de sus familias y, en definitiva, de la comunidad. 

Desde Shamuk buscamos nuevos usos y diseños a las artesanías tradicionales, respetando su esencia y la historia que hay detrás. Asimismo, nos dirigimos a nuevos mercados con el fin de que las mujeres puedas vender más y mejor. Shamuk vende en y desde España todo lo que producen las mujeres con las que colabora.

El propósito es generar valor añadido a los productos que ellas hacen, porque de esta manera, se podrán vender en sitios diferentes a los mercados habituales a los que han acudido tradicionalmente sin demasiado éxito. Desde Shamuk buscamos nuevos usos y diseños para conseguir productos modernos y únicos que enamoren a gente muy diferente de lugares dispares del mundo. Queremos dar a conocer esta artesanía a la vez que conseguimos unos ingresos estables y sostenidos en el tiempo que permitan mejorar las condiciones de vida de todos aquellos con los que trabajamos. .

Pero Shamuk quiere ser mucho más que un proyecto que incremente los ingresos de las mujeres con las que trabaja. Shamuk quiere colaborar a que haya un cambio real y duradero de la situación de la mujer en una sociedad en la que es poco valorada y cuyo cometido queda relegado al entorno familiar y doméstico. Para ello aún queda un largo camino por andar en aspectos alejados de la parte económica, como pueden ser la autoestima, el reconocimiento de su capacidad como mujer y como ser humano, su empoderamiento dentro de la unidad familiar, en su comunidad y, por lo tanto, ante los organismos públicos locales con el fin de que puedan convertirse en ciudadanas con capacidad de incidir en las políticas de dichas Instituciones

Shamuk significa “futuro” en kichwa, más concretamente, “lo que está llegando”, porque ese es el objetivo: mejorar el futuro de estas mujeres, de sus familias y, en definitiva, de la comunidad. 

producción

Todos los productos que comercializamos en Shamuk están producidos de forma artesanal, con las técnicas ancestrales y tradicionales de las distintas comunidades con las que colaboramos. Están hechos a mano o con telares manuales o semimanuales.

Las materias primas con las que se confeccionan las artesanías son naturales. Destacan la lana de oveja, la cabuya (fibra natural que se obtiene de un agave que crece a lo largo de las cuencas andinas), el cuero, el algodón, etc.

En la medida de lo posible, realizamos los procesos de confección y fabricación en Ecuador, porque el objetivo es que sea allí donde queden los recursos económicos y la inversión. Sólo el trabajo de tapizado y las bases de los muebles se hacen en España porque el coste de transporte de Ecuador a España de objetos tan voluminosos los encarecería en exceso y , además, porque la mayoría de esas piezas se realizan a medida y por encargo.

Detrás de cada shigra, bolso, collar, puff, chal de macana, sombrero, etc, hay una historia personal de una artesana que nunca creyó que su destreza pudiese llegar tan lejos y ser disfrutada y valorada por personas con un modo de vida tan distinto al suyo. Todo lo que vendemos en Shamuk es fruto de integrar técnicas y conocimientos ancestrales de artesanía con los gustos, los usos y las necesidades del siglo XXI.

dónde trabajamos

Las comunidades con las que trabajamos están situadas a lo largo de la cordillera de los Andes ecuatorianos, desde el norte en la provincia de Imbabura hasta el sur en Loja, pasando por las comunidades de la zona central donde se tejen las shigras, que son las piezas más demandas por nuestros clientes en España.

La gran mayoría de las personas con las que colaboramos son mujeres. Hay un pequeño número de artesanos, pero sabemos que ser mujer en condiciones de pobreza es un agravante añadido a la ya difícil situación en la que viven estas comunidades.

No obstante, dentro de la filosofía que rige la acción de Shamuk, es nuestra intención ir ampliando e integrando a nuevas artesanas de otras zonas como la costa o la Amazonía ecuatoriana.

comercio justo

Proyecto Shamuk está sustentado bajo los principios de Comercio Justo, como el pago de precios justos a los productores, garantizar las condiciones de trabajo decente y la equidad de género. Colaboramos codo con codo con todos aquellos que trabajan en alguno de los pasos que lleva la confección o la fabricación de los productos que comercializamos.

El fin esencial de Proyecto Shamuk es ayudar a la mejora de las condiciones de vida de las mujeres con las que colaboramos y, por lo tanto, a las de sus familias y comunidades.

sobre Paz

Soy Paz, la fundadora de Proyecto Shamuk.

Hasta no hace mucho, trabajaba en Madrid en una empresa de decoración y, antes, en el sector financiero. Siempre estuve vinculada a diferentes ONG’s en España como voluntaria, pero no es hasta 2014 cuando viajo fuera para conocer proyectos de cooperación en países en desarrollo.

En agosto de 2014 llego a Ecuador como voluntaria de una Fundación española para colaborar con grupos de mujeres que estaban iniciando pequeños emprendimientos con el fin de incrementar los ingresos de sus familias.

Tras varios viajes más, en septiembre de 2016 dejo mi trabajo, cierro mi apartamento y regreso para pasar todo un año como voluntaria. Es entonces cuando inicio Proyecto Shamuk, ya de forma independiente a mi colaboración con la Fundación.

Este cambio vital llevaba gestándose en mí hace décadas, pero dicen que las cosas llegan cuando uno está preparado para recibirlas. Supongo que así es. Y aquí me tenéis, poniéndole todas las ganas e ilusión del mundo para que Shamuk crezca y pueda consolidarse porque detrás de este proyecto hay gente que podrá mejorar sus condiciones de vida y las de sus familias.

Hay mujeres muy valientes que luchan cada día por salir adelante, y que son un ejemplo para aquellas otras que hemos tenido la fortuna de nacer en un mundo, también imperfecto, pero mucho más igualitario, con más oportunidades y en el que ser mujer es, sin duda, inmensamente más fácil. Por eso, yo me siento en deuda con ellas y quisiera devolverles parte de lo que la vida me ha dado a mí apoyando sus iniciativas y aportando mi experiencia y conocimientos para que consigan sus objetivos.